Confinamiento de una mamá de tres

Mi padre comenzaba muchos de sus sermones a mi hermana y a mí diciendo: El hombre es un ser social y como tal, etc. Eran sus palabras mágicas para remover nuestra conciencia y para hacernos pensar que no estábamos solos que éramos parte de algo más grande y que debíamos dejar a un lado el egoísmo. Como alguien tan insignificante como yo, podía preocupar tanto. O podía hacer grandes cosas por mí entorno. El nos enseñó a dejar huella en los demás y a hacer cosas pequeñas, que fueran grandes para los demás.

Ser antisocial me ha hecho más social


Sólo puedo decir que hoy me doy cuenta que este encierro antisocial nos ha hecho ser menos egoísta y llevar el concepto social a un nivel inesperado. Hemos conseguido ser más sociales que nunca en la más absoluta Soledad.

¿Pero cómo es posible que privarnos de pertenecer a un conjunto, haya ayudado a avanzar al propio conjunto?


Los días de confinamiento hemos tenido de todo. Días de auténtica tristeza. Días de auténtica alegría, al estar más juntos en familia que nunca. Días de desesperación. Días de Consuelo. Días de satisfacción como madre. Días de sentirme la peor madre del mundo.

Entretenimiento

Hemos aplaudido, hemos sacado la bandera de España, hemos hecho Bizcochos. Hemos tenido charlas, vino y risas. Llantos y Miedos. Semana Santa. Disfraces y bailes. Ejercicio. Retos. Feria. Deberes y la satisfacción del trabajo hecho. En resumen vivir.

Trabajo en equipo

Todo un sinfín de sentimientos que se iban contraponiendo para llegar al maravilloso sábado en el que volví a ver a mi madre a mi hermana a mi cuñado (que es prácticamente mi hermano) a mis sobrinos y disfrutar todos juntos de un día normal, sentados a la mesa y hablando sobre cualquier cosa. Tomar café y disfrutar de un bizcocho, ojito con esto, que ese bizcocho no lo hice yo. Me imagino la alegría de las familias al reencontrarse después de la preocupación y miedo pasado, poder volver de nuevo a disfrutar de su compañía.

¡Wow! al ver a mis hijos disfrutar con sus primos y pensé que día más maravilloso. Volver a ser sociales y volver a sentirnos, por tenerlos al lado y no verlos por una pantalla. Todo lo pasado no importaba porque estamos bien. Me sobrecoge saber que no todas las familias están completas.

Durante este encierro he podido conocer mejor a mis hijos me he dado cuenta de fallos, pero me he dado cuenta de sus virtudes, de lo listos que son, de como plantean soluciones a problemas que jamás se me habría ocurrido, son unos niños ingeniosos, sensibles, me han enseñado a ser más paciente y a ser más empática. Me han enseñado que entienden mejor que adultos la gravedad mundial por la que estamos pasando.

Pienso en lo bien que se ha portado la población en general. Frente a la insensatez de grupos contados. La gran mayoría de los españoles nos hemos contenido, luchando por conseguir un objetivo común, vencer al virus Covid-19.

Videoconferenciando

El confinamiento no sé que consecuencias tendrá a largo plazo. Seguro que lo estudiaran más adelante. Está claro que ya tiene unas graves consecuencias psicológicas y por supuesto económicas.

Pero no puede caer en saco roto todo lo que se ha luchado estos días y lo que aún nos queda. No puede caer en saco roto el sacrificio de cada uno de nosotros. El aislamiento de cada individuo peleando por vencer a un virus, que se ha llevado a muchas personas, a los más vulnerables. Tantos sanitarios y cuerpos de seguridad y tantos personas esforzándose todos los días por salvaguardar lo más preciado que tenemos la vida.

Hoy miro atrás y veo que juntos se puede. Hoy miro atrás y me da fuerza para seguir mirando el presente. No necesito hacer grandes planes. Sólo espero que sigamos manteniendo las medidas recomendadas y que seamos sensatos y no volvamos atrás.
Seguir siendo antisociales para salvaguardar nuestra sociedad. Hoy más que nunca los políticos deberían ceder para sumar. Dejar de imponer sus intereses para salvaguardar los de todos.

No sé qué pasará mañana, pero de lo que estoy segura es que somos una gran nación y que seguiremos avanzando para alcanzar el bienestar de todos.

Los juegos de mesa

Deja un comentario